A mediados de los años 60, durante el boom económico italiano, Rolando Lavelli era entonces un joven de dieciocho años que encontraba su camino en una empresa de moldeación de caucho entre las provincias de Bergamo y Brescia. El favorable desarrollo de este sector como el de otros de la industria italiana y el deseo de construirse una colocación profesional autónoma, convencen Rolando a involucrar en una pequeña actividad empresarial al hermano Roberto y a los padres, justo en el ámbito de las juntas industriales de caucho.
1973 Paratico -> 1974 Viadanica -> 1980 Credaro -> 2003 Cologne: son las etapas locales de una realidad industrial en el sector de las juntas de caucho que mira hacia Europa. En 1980 hubo el cambio de la política empresarial de LAV.EL GOMMA que llevó la empresa a pasar de productora para terceros a proveedora directa de grandes distribuidores en toda Europa, de esta manera se triplicó el número de empleados respeto al 1974.
En el año 2001, tras la prematura desaparición de Roberto, sigue la consolidación de la empresa por medio de la familia Lavelli con la elección a vicepresidente de Cristian, hijo de Roberto, y con el ingreso en el consejo de administración de Gabriele, hijo de Rolando. En el año 2001 encontramos también otra etapa fundamental tras el conseguimiento de varios certificados de homologación sobre una gama siempre más amplia de materiales y productos que comprenden cada tipo de juntas que se producen directamente para los usuarios finales. A partir de ese momento muchas empresas pudieron contar con entregas garantizadas para un uso inmediato en sus productos.
Este cambio en la política comercial aseguró a partir del 2001 un aumento medio de la facturación anual del 15%. Estamos ante un crecimiento querido por una familia que invirtió en dos recursos fundamentales: empleados calificados y especializados; innovación e investigación como elementos imprescindibles en un sector productivo de alto nivel tecnológico.